viernes, 1 de agosto de 2014

CORRIENTE LIBERTADORA DEL NORTE





Tras la proclamación de independencia del estado peruano el proceso parecía estancado por la resistencia militar española, y la inestabilidad del protectorado. Así, mientras la costa y el norte del Perú eran independientes, la sierra peruana y el Alto Perú seguían siendo realistas. El virrey La Serna había restablecido su sede de gobierno en el Cuzco. Mientras el motín de Balconcillo fue el primer golpe de Estado que hubo en el Perú y el inicio del cuadillaje militar (Primer Militarismo); vale decir, un alzamiento de militares en Lima, el 27 de febrero de 1823, que pidió la proclamación de José de la Riva Agüero como Presidente de la República. Una nueva campaña militar dirigida por el general Santa Cruz que trata de terminar con el Ejército Real del Perú también es derrotada.
La conclusión de la guerra en el Perú vendría con la intervención de la Gran Colombia. Ante la retirada del Protector, y tras las derrotas militares del presidente Riva Agüero, el Congreso peruano decidió solicitar en 1823 la intervención de Simón Bolívar. Bolívar ya había enviado antes al general Antonio José de Sucre, quien mantuvo la autonomía de las agrupaciones militares de Colombia, sin comprometerlas en las campañas de intermedios. Bolívar tras acabar con la resistencia de los pastusos en la batalla de Ibarra, se embarcó y arribó a Lima el 10 de septiembre de 1823.
En 1824, desarticulado el ejército realista por la Rebelión de Olañeta en el Alto Perú, dio lugar la campaña militar de Junín y Ayacucho que sería favorable a los patriotas. El Ejército Unido Libertador del Perú triunfó en la batalla de Junín a las órdenes del Libertador Simón Bolívar, y en labatalla de Ayacucho a las órdenes del general Antonio José de Sucre. La capitulación de Ayacucho puso fin al virreinato peruano.
Sucre cruza el río Desaguadero con las divisiones de Córdova y la división del Perú del ejército libertador.13 Bastiones y unidades realistas capitulan unas tras otras. La guerra regular en el Alto Perú termina con el combate de Tumusla. El gobierno del Perú (lo mismo que el rioplatense el 9 de mayo de 1825), emite un decreto donde pide la delimitación de la fronteras y también deja en libertad a Simón Bolívar para resolver la pertenencia del Alto Perú a la Argentina o el Perú, o la independencia de Bolivia que fue lo que finalmente ocurrió.
Resolución del Congreso constituyente del Perú se deja al juicio del Libertador el establecimiento de un gobierno provisorio en las provincias indemnización para el caso de que las Altas queden separadas de las del Perú. Decreto del 23 de febrero de 1825:

artículo 3º: que si verificada la demarcación según el artículo constitucional resultaren las provincias Altas separadas de esta república el gobierno a quien pertenecieren indemnizará al Perú los costos causados en emanciparlas.

La guerra sin embargo continuaría hasta su conclusión en el año 1826 con la Campaña de Chiloé y la rendición de la fortaleza del Real Felipe.
El 4 de septiembre de 1826, Bolívar se embarca en el bergantín "Congreso" con dirección a Colombia y no regresaría más al Perú.